«Una muerte imprevista y un error de tanta envergadura que, para subsanarlo, su protagonista tendrá que atravesar una frontera, la que lleva del mundo de los muertos al mundo de los vivos.»
Diálogos chispeantes, hermosas descripciones y una atmósfera de extraña cotidianeidad hacen de Lady Mary una obra particularmente notable, alejada de los modernos estereotipos del género de fantasmas.